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Historia mafiosa de los helados Pérsico
Por Dr. Roberto J. Wilkinson - 31 de Agosto, 2013, 20:26, Categoría: Opinión
Conozca la historia de la lujosa cadena de heladerías del Movimiento
Evita de Emilio Pérsico: Emilio Pérsico es el ‘Capitán Frío’ del
kirchnerismo. El líder del ‘Movimiento Evita’ maneja al principal monopolio de
heladerías artesanales de la
Argentina. Hoy en día, el ‘Movimiento Evita’
se ha convertido en una de las fuerzas de choque del régimen kirchnerista y se
destaca por su violencia e intolerancia. Su líder Emilio Pérsico, es uno de los
conductores de este grupo piquetero que atemoriza a la sociedad con su
violencia. El ‘MTD Evita’, se ha reciclado
en épocas kirchneristas como ‘Movimiento Evita’, y a medida que se van
incrementando las protestas contra el gobierno de Cristina Fernández de
Kirchner, crece la importancia de esta agrupación cuyo rol es el de
‘disciplinar’ a fuerza de palo, tumbera y cadenazo a cualquier ciudadano que
intente manifestarse en contra del régimen. Emilio Pérsico proviene de una
familia muy pudiente originaria de la ciudad de La Plata. A diferencia de
sus familiares, al líder piquetero jamás le gustó trabajar y supo ser alumno
crónico del Colegio San José de La
Plata donde se unió a la UES. Como se la pasaba haciendo política, el
sistema educativo lo terminó expulsando a los 19 años de edad tras deambular
por varios institutos. Cuando vino el golpe de estado,
Emilio Pérsico se acordó de que tenía una familia que formaba parte de la
burguesía platense y decidió ‘exiliarse’ con destino a Suecia. Allí fue cuando
Emilio Pérsico se vio obligado a confrontar con ‘el sistema’. Cuando una
persona, especialmente un militante político, se exilia en otro país
(especialmente en Suecia) usualmente llega ‘con una mano atrás y otra
adelante’. Lamentablemente, las autoridades
suecas sorprendieron a un desaliñado Emilio Pérsico cobrando un giro que le
enviaba su familia desde La
Plata, entonces sin mediar otra explicación decidieron
detenerlo y expulsarlo. El futuro piquetero recaló en
España, pero su fervor revolucionario se apagaba cuando llegaba a la ventanilla
de los bancos para cobrar los dólares que semanalmente le remitían sus
laboriosos familiares desde la ciudad de las diagonales. Su incursión terminó
con el llamado de un gerente de un banco que requirió la presencia de la
policía española, porque desconfiaba de la palabra de un mendigo que quería
cobrar mil dólares provenientes de Buenos Aires. Tras varios días de arresto,
España le sugirió al piquetero que siguiera su dudoso exilio en otro país. Para
las autoridades españolas Emilio Pérsico no tenía miedo de caer en las garras
de la dictadura militar, el problema era que el duro dirigente social le temía
al duro trabajo en la heladería familiar y esto lo decidió a probar suerte en
México. Cuando el líder piquetero intentó
darle cátedra de ‘socialismo’ a los descendientes de Pancho Villa, la única
respuesta fue emular al ratoncito ‘Speedy González’ con una rápida huida hacia
la ciudad de La Plata. Era
evidente que el mundo no estaba preparado para Emilio Pérsico. Tras bajarse del ‘Río de la Plata’ y retornar vencido a
la casita de los viejos, este personaje comprendió que el rol central de la
sociedad le corresponde a la clase trabajadora y que existía una persona capaz
de enseñarles el camino: Emilio Pérsico. Ahí el piquetero se fue fogueando
en diversas plantas fabriles como un molesto aprendiz, que cuestionaba
ideológicamente a los capataces que lo mandaban a baldear el baño. Emilio
Pérsico se convirtió en un abonado a los despidos, y tras comprender que el
secador y el balde no son las armas de un verdadero revolucionario decidió
pasar a la lucha. Y si de lucha se trata, nada
mejor que unirse a las huestes de Vicente Leónidas Saadi y refugiarse en las
nubes de Úbeda del nepotismo catamarqueño. Pronto desfiló por el peronismo
revolucionario, pasó al ‘peronismo que resiste’ y se integró a Quebracho. Pero Quebracho le quedaba chico a
este visionario de la política y entonces decidió crear el ‘Movimiento de
Trabajadores Desocupados Evita’. En sus primeras declaraciones públicas, este
iluminado declaraba a los medios que el piquete era una herramienta para luchar
por el trabajo y la inclusión social, dos cuestiones cruciales para la
reconstrucción del país. Cuando se integró a la
‘Coordinadora Aníbal Verón’ lo único que logró fue profundizar la crisis y la
confusión del primitivo movimiento piquetero. Pero cuando apareció Néstor
Kirchner, el MTD Evita se lanzó a los pies del pingüino mayor y comenzó a
generar su espacio de poder al calor del oficialismo. Cuando Emilio Pérsico logró
colarse en un proyecto político, su clan familiar recibió al ‘hijo pródigo’ con
los brazos abiertos y le planteó la posibilidad de colaborar económicamente en
la lucha incansable por los derechos de los trabajadores. Gracias al aporte
económico de las ‘Heladerías Pérsico’, el MTD Evita pasó a ser el ‘Movimiento
Evita’ y con el correr de los meses, se convertiría en uno de los actores
fundamentales en la compleja ingeniería de poder de Néstor Kirchner. Es interesante repasar la evolución
de esta laboriosa familia platense. Cuando llegó de Italia, su abuelo Julio
Pérsico, abrió una verdulería en pleno centro de la ciudad de las diagonales
(Diagonal 80 y calle 6). A diferencia de su nieto, el Pérsico que trabajaba
puso todo su empeño en progresar y se asoció con su primo Luigi Aversa, un
trabajador nativo de Sorrento que se dedicaba a vender pescado y maní en la
ciudad de Mar del Plata. En el año 1931 adquirieron un
local en Diagonal 80 y calle 5, donde abrieron un almacén que fue evolucionando
hasta convertirse en un local donde se dedicó exclusivamente a la venta de
helado artesanal, con el nombre de ‘Helados Pérsico’ (con una sola ‘c’). Gracias a la auténtica cultura
del trabajo, Luigi Aversa fundó en 1969 la reconocida cadena de helados
artesanales ‘Freddo’. Por aquellos años, ya se integraron a la sociedad los
hijos del ‘Nono’, Federico y Pablo Aversa, acompañados por su cuñado Salvador
Guarracino. Su primer local fue instalado en el corazón de la Recoleta (Pacheco de Melo
esquina Callao) y con el tiempo se expandió hasta tener cincuenta sucursales. Durante la época menemista, la
familia Aversa decidió hacer negocios con el grupo inversor ‘Exxel’, que compró
la cadena de helados ‘Freddo’ por 75 millones de dólares. Con posterioridad, el
grupo económico de Juan Navarro vendió esta empresa al fondo de inversión
‘Pegasus’. Durante esta administración, ‘Freddo’, redujo su expansión a 32
locales pero incorporó a su negocio una cadena de cafeterías con el nombre de
‘Aroma’. En noviembre del 2001, cuando
caía el gobierno de Fernando de la
Rúa, el corralito inmovilizaba los ahorros de miles de
argentinos y comenzaba el auge del movimiento piquetero. Los empresarios
Federico Aversa y Juan Martín Guarracino deciden retomar su actividad dentro del
rubro de la producción de helados artesanales bajo el nombre de ‘Helados
Persicco’ (con dos ‘c’) y la otra parte de la familia, Silvina y Leandro Aversa
optaron por abrir otra cadena de heladerías bajo el nombre de ‘Un Altra Volta’
(hoy conocida como ‘Volta’). En el año 2006, el gobernador
Felipe Solá cedió a las presiones de la influyente familia Aversa, y bastó una
recomendación de Néstor Carlos Kirchner para que el piquetero Emilio Pérsico
fuera designado como subsecretario de gabinete de la Gobernación de la Provincia de Buenos
Aires. Esto le posibilitó al influyente
dirigente piquetero, acceder a innumerables líneas de crédito en el castigado
Banco de la Provincia
de Buenos Aires y desde su despacho manipulaba decenas de planes sociales, a
los cuales el ‘MTD Evita’ les incautaba el 50% de su importe como ‘impuesto
revolucionario’ para financiar la lucha piquetera. Obviamente que durante la
gobernación de Felipe Solá y el gobierno de Néstor Carlos Kirchner, ‘la
heladería’ fue uno de los grupos económicos más beneficiados en materia de
otorgamiento de créditos millonarios por parte del Banco de la Nación Argentina
y el Banco de la Provincia
de Buenos Aires. Gracias a una hábil
administración por parte de los contadores que administran a este monopolio de
heladerías artesanales, una buena parte de los dineros públicos que ingresan
sus las arcas, van a parar a la caja política que mantiene la operatividad del
‘Movimiento Evita’ de Emilio Pérsico. Por lo visto, la violencia
social, la quema de cubiertas y los piedrazos, han sido muy productivos para el
crecimiento de los negocios de la familia Aversa. Han instalado trece locales
de gran categoría que apuntan a un público de alto poder adquisitivo. La
conclusión que uno puede sacar, es que al ‘brazo heladeril’ del ‘Movimiento
Evita’ le encanta recibir en sus locales al mismo segmento social que los
movimientos piqueteros dicen odiar por cuestiones ideológicas y raciales. Actualmente la heladería Pérsico
tiene seis lujosos locales en Palermo (Salguero y Cabello), Belgrano
(Migueletes y Maure, dentro del complejo ‘La Imprenta’ y Vuelta de
Obligado 2092, en el local lindero a la iglesia ‘La redonda’ de Cabildo y
Juramento), Caballito (Rivadavia 4933), Pilar (en el ‘Office Park’ de
Panamericana Km. 42,5) y en Tigre (en centro comercial del country Nordelta). El grupo de heladerías ‘Un Altra
Volta’ cuenta con siete locales de primera categoría. Actualmente conserva el
local original de ‘Freddo’ de Pacheco de Melo y Callao. Tienen otro local en
Recoleta (Quintana y Ayacucho) y un tercer local se encuentra en Santa Fe 1826
(casi Callao) en pleno corazón de Barrio Norte. Se sabe que el movimiento
piquetero es enemigo de los monopolios. Pero es interesante apuntar la cercanía
(y la habilitación comunal) de ciertos locales de ‘Un Altra Volta’ con los de
su cadena ‘rival’: a) El local de ‘Volta’ que se ubica en Echeverría 2302 de
Belgrano, ‘compite’ con el emprendimiento que tiene ‘Helados Pérsico’ a menos
de 100 metros
en Vuelta de Obligado 2092. b) Otro ‘Un Altra Volta’ se encuentra en Palermo en
Libertador 3060 (casi esquina República de la India), y se encuentra a pocas cuadras del local
de ‘Pérsico’ de Salguero y Cabello. Un segundo local de ‘Un Altra Volta’ está
ubicado a solamente tres cuadras (Coronel Díaz y Cerviño). c) Los vecinos de
Pilar pueden disfrutar de ‘Un Altra Volta’ en el shopping ‘Las Palmas del Pilar
Shopping’ (Panamericana Km.50), mientras los seguidores de ‘Pérsico’ pueden ir
hasta el ‘Office Park’ de Panamericana Km.42,5). Todos estos locales son de alto
costo y dirigido a un público consumidor que ideológicamente está muy lejos del
‘Movimiento Evita’. Además, tienen la costumbre de ‘invitar a retirarse’ a los
niños pobres que suelen mendigar en sus adyacencias. Así que cuando adquiera un exquisito
helado artesanal en los locales del ‘Movimiento Evita’, tenga en cuenta que con
su compra está financiando a una de las más organizaciones sociales más
radicalizadas de la
Argentina, y que a mediano plazo van a ser las mismas
personas que impulsadas por el odio racial e ideológico, van a atentar contra
sus derechos humanos. Por Dr. Roberto J. Wilkinson |