No hay duda alguna que la provincia de Buenos Aires es un oropel, ya que cada vez anda peor ante la pésima administración de Felipe Solá. Con razón Cristina Fernández de Kirchner le está huyendo a la posibilidad de postularse para gobernadora de la misma, e incentivando la postulación del hasta ahora vicepresidente, Daniel Osvaldo Scioli, un hombre que el gobierno nacional trata como ciudadano de segunda y alejan de todo tema de la agenda presidencial. En otras palabras, la provincia de Buenos Aires quema las manos. ...- Leer artículo completo